Buscar

27 de junio de 2012

El happy hour de MacCafé

Hacia mucho calor, pero no me importaba, yo quería tomarme un café, así que le pedí a Santiago, un amigo, que me acompañara a MacCafé, cuando iba a pedir el cappuccino mocca que siempre pido, la chica que atendía nos dijo que había happy hour, así que pagábamos un café y recibíamos otro, me emocioné, pero me duró menos que menos la dicha, cuando mi querido amigo abrió la boca y dijo: “Ah bueno, entonces dale el cappuccino a ella, y a mi dame dos smoothies de mango y durazno”. What??? Sí, el tipo no toma nada caliente, así que se supone que pagaríamos lo que íbamos a pagar sin saber que había happy hour y yo me iba a tener que tomar dos cafés enormes. No era negocio para mi cuerpo el meterle una doble porción de un espresso doble con salsa de chocolate caliente, espuma de leche y cacao.  Pero Santi, educado por una madre como la de todos, enferma por las promociones del Éxito, donde se llevan paquetes de cocas plásticas que no necesitan, sólo porque pagas una y llevas ocho, se fue a la mesa con sus dos smoothies. No pudimos hablar de nada porque el pobre se la pasó tratando de digerir el alto contenido de azúcar de su vaso, tanto que cuando iba en la mitad del primer smoothie, le tocó pedirle a la chica que le echara agua ,  así que el segundo lo dejó en la mesa sin tocarlo.  Esas son las pequeñas revanchas que me da la vida, eso le pasó por no compartir conmigo el happy hour.


Smoothie de mango y durazno. Foto Macdonalds
Sé que MacDonalds es como Ricardo Arjona, todos lo odian, pero hay quien lo escucha en secreto, A mi no me da pena decir que voy, tengo razones que no tienen que ver con la hamburguesa, pero eso lo cuento en otro post. El tema es que MacCafé me gusta mucho, al menos acá en Colombia hasta en ese lugar tomás buen café. El MacCafé de la avenida del Poblado, al lado de Oviedo, es el que más me gusta porque está medio separado  del MacDonalds, lo que te aísla  de ese olor a grasa tan característico del restaurante de comida rápida más popular en el mundo. El  local de Laureles no tiene la ventaja  de estar separado pero tiene una terraza en el segundo piso,  de por lo menos 100 mts cuadrados, donde  no tenés el ruido de los niños en los jueguitos ni el griterío de los adolescentes.


Arriba del MacCafé está la terraza, si llueve o hace mucho sol abren las sombrillas

Después de mi frustrado happy hour con Santiago, regresé con Carolina mi amiga  para asegurarme de que las dos pediríamos lo mismo, pero nos enteramos que el happy hour es de  lunes a jueves, de 3 a 5 de la tarde,  Caro cumple horarios de oficina, así que nunca le tocara el happy hour, que parece ideado para amas de casa, desempleados, estudiantes y ese grupo  selecto que maneja su tiempo. No, no estoy en ese grupo, estoy en el de los desempleados.


El cappuccino mocca cuesta $4.600



Como nos gusta tanto el MacCafé y hasta una promoción es buena excusa para pasar un rato con una amiga, nos tomamos dos capucchinos mocca y compartimos una porción de chesscake de frutos rojos y un palito de queso. El café estaba rico y el cheesecake estaba suave, y nada dulce, el palito de queso, pues lo de siempre con esos palitos,  te quitan el hambre pero no te cambian la vida, los sacan de la vitrina, les dan un golpecito de horno y te lo comes y seguís tu vida. Nada memorable. Por los dos cafés, el cheesecake y el palito de queso pagamos $17.000.


Ya saben, si por alguna razón están libres de 3 a 5 de la tarde de lunes a jueves, supongo que los festivos no aplica, pueden darse una pasadita por MacCafé, el happy hour solo aplica para las bebidas sean frías o calientes, eso si no pidan Smoothies, a no ser de que tengan más tarde un examen de curva de glicemia.

2 comentarios:

  1. A Santiago solo le importaba tu compañía, recuerda que a vivido toda su vida entre montañas y definitivamente lo mueven los mas básicos instintos, entre ellos la gran atracción que le producías, lo interesante y embelesador de tu voz y boca.

    Un mal producto pero la mejor compañía.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ah buuuuuueeehhhh, esto se vino con declaración tardía de amor y todo. Jajaja, Nahhh, vos sabés, Santiago, que tengo la mejor onda con vos. Un Beso, y me iré a amasar tus tartas.

      Eliminar